En un encuentro que marcó un hito en la interacción entre la política ambiental y las comunidades costeras de Colombia, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, se reunió con un grupo diverso de más de 30 ambientalistas y científicos. Este grupo, preocupado por las implicaciones de la reciente resolución de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap), que permite las capturas incidentales de 15 especies de rayas y tiburones, expresó sus inquietudes y propuestas. Entre los asistentes se encontraban figuras destacadas como Manuel Rodríguez Becerra, exministro de Ambiente y fundador del Foro Nacional Ambiental; Sandra Bessudo, de la Fundación Malpelo; las senadoras Esmeralda Hernández e Isabel Zuleta; y representantes de la Universidad de los Andes, WCS Colombia y la Fundación MarViva, entre otros.
La controversia se centra en la resolución 0119 de 2024 de la Aunap, que responde a una solicitud de casi tres años por parte de las comunidades del Pacífico. Estas comunidades se vieron afectadas por un decreto de marzo de 2021, expedido por el entonces presidente Iván Duque, que prohibía la pesca de tiburones y rayas marinas, incluso cuando eran capturados incidentalmente. La nueva resolución busca establecer “reglas de juego” claras para que estas comunidades puedan aprovechar de manera legal y sostenible los tiburones y rayas capturados incidentalmente, sin comprometer la conservación de estas especies.
Durante la reunión, se definieron tres líneas de trabajo clave. En primer lugar, se adelantará un Programa de Gobernanza para las comunidades pesqueras, financiado por el Ministerio de Ambiente. Este programa busca mejorar la gestión y sostenibilidad de las prácticas pesqueras. Además, se establecerá una Mesa Técnica que revisará la resolución 0119 y contrastará la lista de especies amenazadas, asegurando que las medidas adoptadas no pongan en riesgo a las especies vulnerables. Por último, se creará un Consejo Nacional de Lucha Contra la Deforestación y Otros Crímenes Ambientales (Conaldef), enfocado exclusivamente en combatir la pesca ilegal.
La ministra Muhamad enfatizó la importancia del diálogo y la búsqueda de convergencia entre las partes, destacando que el objetivo es reglamentar la captura incidental de manera que se recupere la confianza de las comunidades y se promueva la conservación. Por su parte, Sandra Bessudo calificó la reunión como “importante y fructífera”, señalando que se habían alcanzado acuerdos significativos para fortalecer el sector ambiental en relación con el desarrollo pesquero y la gestión de la pesca incidental.
Este encuentro representa un paso adelante en el complejo equilibrio entre la conservación ambiental y las necesidades económicas de las comunidades costeras. La resolución 0119, que estará abierta a comentarios hasta el próximo 24 de febrero, es un testimonio de la voluntad de las autoridades de escuchar y trabajar conjuntamente con los diferentes actores involucrados. La colaboración entre el gobierno, los ambientalistas, los científicos y las comunidades pesqueras es fundamental para asegurar un futuro sostenible para las especies marinas y para quienes dependen de ellas.
